12.9.12

FIESTA PATRIA


¡Debemos aprender a valernos por nosotros mismos! ¡Debemos ser dueños de nuestro propio destino!, dijo Priscila. Debemos de conquistar la democracia para tener un cierto grado de control acorde a nuestras  necesidades como mexicanos. ¡Basta del odio o aversión a nuestro origen! Mario tomó un gran sorbo a su cerveza caliente que llevaba  escondida en su saco ¡Mientras no hagamos nada, siempre habrá fuerzas mágicas que nos quieran meter la verga!, dijo Priscila. Mario la miró atentamente, era la primera vez que terminaba una oración completa desde que la había conocido apenas tres horas antes en una cantina del centro. Recordó que ni siquiera había hablado mientras se la estaba cogiendo en el “Hotel Revolución”, ubicado en la colonia Guerrero. Mientras las cosas no cambien seremos los hijos de la nada, continuó Priscila. ¡Debe de caer la puta máscara de la mexicanidad, para mostrar nuestro propio rostro!
El  discurso sobre la vida existencial del mexicano siguió ese 15 de septiembre rumbo al Zócalo.

por Jaime Martínez

No hay comentarios:

Publicar un comentario